¿Trabajar o estar embarazada? Lo puedes todo

Como mujeres, sabemos que hacer dos cosas al mismo tiempo, es muy de nosotras, y trabajar durante el embarazo, no es la excepción. Por eso, quiero contarte cómo disfrutar plenamente esta gran etapa al lado de tu bebé, también en el trabajo.

Si crees que trabajar durante tu embarazo es muy difícil, ¡olvídate de eso!, no tienes nada de qué preocuparte, sólo cuida tu postura, si pasas mucho tiempo sentada; haz ejercicio como caminar o yoga prenatal –a nosotras no sabes cómo nos funcionó–; evita usar prendas ajustadas, siempre elige comodidad; y procura dormir y comer muy bien, tener mucha energía es clave.

La información es poder, así que llénate de ese poder consultando la ley laboral de tu país, ya que ahí encontrarás todos los derechos que tienes como trabajadora embarazada y cómo hacerlos valer. Mientras tanto, te pasamos algunos que aplican casi en todo el mundo:

Puedes solicitar permisos para asistir, en horario laboral, a exámenes prenatales; derecho a 90 días de descanso remunerado; y a ser reubicada en tu trabajo, si éste pone en riesgo tu embarazo.

Ya que estás informada sobre tus derechos, seguramente te preguntarás hasta cuándo seguir trabajando. No existe una fecha ideal, depende del tipo de trabajo que realices y las características de tu embarazo; así que escucha con mucha atención a tu ginecólogo e informa a tu empleador sobre todo lo que necesites.

Con esto en mente, ya puedes dejar tus dudas en casa y salir a tu trabajo con tranquilidad. Recuerda que todos los casos son diferentes, no te compares con otras mujeres embarazadas y mantente al pendiente de las señales de tu cuerpo y de las indicaciones de tu ginecólogo. Lo más importante es que tú y tu bebé estén bien.